Cómo distinguir la gripe del resfriado

El virus de la gripe tiene la capacidad de mutar cada año. Así es como consigue engañar a nuestro sistema inmune para atravesar sus barreras. Generalmente los cambios son pequeños y el organismo consigue crear nuevas defensas. Se sabe que aproximadamente cada diez años la mutación es más fuerte y la gripe se vuelve especialmente virulenta y contagiosa.

Cómo se transmite
Lo hace con rapidez, de persona a persona, mediante dos vías principales:
Por aire. Cuando un enfermo tose o estornuda, o al hablar, la pequeñas gotas de saliva o mucosidad propagan el virus.
Por contacto. Cuando la persona enferma tose o esturnuda sobre alguna superficie y otras personas están en contacto con esos objetos.

¿Gripe o resfriado?
Sobre todo en los primeros momentos, suele confundirse la gripe con un simple resfriado. Las diferencias principales son:
Las dos enfermedades cursan con síntomas como mucosidad nasal abundante, dolor de garganta y tos.
Solamente la gripe se desarrolla además con fiebre muy alta, dolores musculares y articulares y escalofríos causando un mayor malestar general.

Tratamiento
Es necesario que el proceso remita por sí mismo, durante el cual se pueden paliar los síntomas mediante:

• Medicamentos antivirales. Indicados cuando existe un riesgo grave de salud para atenuar la infección. Los antibióticos solo están indicados en infecciones bacterianas.
• Descongestionantes y analgésicos. Para el dolor y para atenuar las crisis de fiebre.
• Reposo, hidratación mediante la ingesta de abundante líquido, dieta ligera.

Prevención
Lavarse las manos frecuentemente y extremar la higiene si convive con personas enfermas.
Conservar las superficies lo más limpias posible.
Precaución al estornudar. Aunque no se sienta enfermo, puede estar incubando la gripe.